Tres conceptos que debes saber sobre Educación Financiera
El correcto manejo de conceptos como flujo de caja, presupuesto y endeudamiento responsable pueden ser una palanca para la sostenibilidad de cualquier empresa.
Business Empresarial. Se llama educación financiera al conjunto de conocimientos y herramientas necesarios para una correcta gestión del negocio. De acuerdo con la tercera Encuesta Nacional de Capacidades Financieras en el Perú (2022) desarrollada por La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), solo el 36% de los adultos peruanos tienen conocimiento sobre conceptos relacionados con este tema.
Nuestro país cuenta con más de 3.27 millones, para quienes la educación financiera puede ser un factor clave sin importar la fase en la que se encuentre su empresa, ya sea en el lanzamiento como en su expansión. Reconociendo su relevancia, Aldo Barco, gerente de Administración y Finanzas de Footloose, comparte su perspectiva sobre tres conceptos esenciales que todo emprendedor debe dominar para gestionar eficazmente sus proyectos y garantizar el crecimiento de su empresa.
1. Flujo de Caja: Se trata del indicador que muestra el estado de tesorería de una empresa. Controlar y prever los movimientos de efectivo permite a los emprendedores anticipar problemas y tomar decisiones informadas. Aldo Barco señala: «Un manejo adecuado del flujo de caja garantiza que la empresa pueda cubrir sus gastos operativos y estar preparada para imprevistos. Es esencial que los emprendedores comprendan sus ciclos de ingresos y egresos para evitar crisis de liquidez». Asimismo, ofrece a los emprendedores y posibles
inversores una fotografía clara de la capacidad de la compañía para generar liquidez.
2. Presupuesto: El presupuesto es una herramienta fundamental para la planificación financiera. Gracias a este se puede determinar la solvencia, rentabilidad y liquidez de la empresa. Además, permite a los emprendedores establecer metas financieras claras y monitorear el desempeño financiero de su negocio. Al elaborarlo y seguirlo, los emprendedores pueden mantener el control sobre sus finanzas. No solo deben prever gastos e ingresos, sino también ajustarse a los cambios y realidades del mercado.
3. Endeudamiento Responsable: La capacidad de utilizar el crédito de manera estratégica puede ser un motor de crecimiento, pero el exceso de deuda puede ser el inicio de una crisis en cualquier empresa. El experto comenta, «Es vital que los emprendedores sepan diferenciar entre deuda buena y deuda mala. La deuda buena es aquella que se utiliza para inversiones que generarán retornos futuros, mientras que la deuda mala es la que financia gastos operativos que no tienen un plan claro de retorno».
Finalmente, tener una sólida formación en educación financiera no solo permite a los emprendedores evitar errores costosos, sino que también les ofrece las herramientas necesarias para tomar decisiones estratégicas y promover el crecimiento de sus negocios. Aldo Barco concluye: «Invertir en educación financiera es una de las decisiones más valiosas que un emprendedor puede hacer. Aunque existen muchos otros conceptos útiles,
dominar estos tres conceptos básicos puede ser determinante para el éxito o el fracaso de cualquier proyecto».