Vehículos electrificados: ¿Cuáles son y qué tecnologías marcarán la conducción del futuro?
Business Empresarial.- El auge de los vehículos electrificados está tomando fuerza en el mundo. En Latinoamérica el país que más avanza en esta dirección es Colombia, gracias a sus agresivos incentivos por parte del gobierno, donde en los primeros 7 meses se han comercializado 16,424 vehículos electrificados logrando un 15.8% de las ventas. En el caso del Perú se ha logrado la cifra de 2,343 unidades vendidas, representando un 2% pero con un incremento de 69% en comparación con el mismo periodo del año pasado, según datos proporcionados por la Asociación Automotriz del Perú (AAP).
David Caro, Gerente de Marketing y Asuntos Corporativos de Toyota del Perú, destacó que a nivel global existen múltiples tecnologías que ofrecen una conducción eficiente y respetuosa con el medio ambiente. “Estas diversas tecnologías permiten atender las necesidades de distintos tipos de usuarios, teniendo en cuenta la infraestructura disponible en cada país. Aunque algunas de estas tecnologías están por introducirse en el Perú, ya podemos apreciar la presencia de la tecnología híbrida eléctrica en el mercado, como parte de la transición hacia una movilidad sostenible», añadió.
A continuación, presentamos los tipos de vehículos electrificados disponibles:
- Vehículos Híbridos Eléctricos (HEV): El sistema híbrido combina un motor de combustión interna con un motor eléctrico el cual se recarga automáticamente. Durante la desaceleración y el frenado, el sistema transforma al motor en un generador, que produce la corriente necesaria para asistir en la propulsión. Esto se traduce en una conducción silenciosa y un bajo consumo de combustible, lo que los convierte en una opción eficiente para la movilidad diaria, especialmente en países con una infraestructura de carga incipiente como el Perú.
En Perú representa el 89% de los vehículos electrificados y en Colombia el 80%.
- Vehículos Híbridos Eléctricos Enchufables (PHEV): Los híbridos enchufables se distinguen por contar con una batería de litio más grande que les permite una mayor autonomía y la capacidad de recargarse mediante un cargador externo, similar a los vehículos eléctricos a batería. Las recargas pueden realizarse tanto con cargadores rápidos (2 horas y media de carga) como con cargadores lentos (8 horas de carga), que se pueden utilizar en el hogar. Cuando la carga de la batería se agota, estos vehículos funcionan como híbridos, garantizando un consumo de combustible eficiente y un funcionamiento silencioso. En Perú representa el 6% de los vehículos electrificados y en Colombia el 8%.
- Vehículo Eléctrico de Batería (BEV): Estos vehículos son 100% eléctricos y necesitan una carga externa. No requieren de un motor de arranque, radiadores ni lubricantes, pero sí incorporan sistemas de refrigeración y componentes electrónicos para gestionar la energía eléctrica. La batería es el componente central y son ideales para una conducción sin emisiones en ciudades con la infraestructura de carga adecuada.
En Perú representa el 5% de los vehículos electrificados y en Colombia el 12%.
- Vehículos Eléctricos de Célula de Combustible (FCEV): El corazón de su funcionamiento es la celda de combustible donde se mezcla el hidrógeno del tanque con el oxígeno del aire exterior. Esa combinación provoca una reacción química que genera electricidad por un lado y agua (H2O) por el otro. Esta electricidad se utiliza para alimentar una batería que, a su vez, impulsa el motor eléctrico. La tecnología de células de combustible de hidrógeno es una prometedora opción para la descarbonización del planeta, aunque aún no está disponible en América Latina. En Latinoamérica esta tecnología es muy nueva y aún no hay ventas significativas.
Estas múltiples opciones de vehículos electrificados están transformando la manera en que nos desplazamos, ofreciendo eficiencia, sostenibilidad y una variedad de alternativas para cada estilo de vida. Después de la pandemia se ha profundizado la tendencia de consumidores cada vez más conscientes de su impacto ambiental, según el informe “Who Cares, Who Does? 2020”, de la consultora Kantar.