Enfermedad pulmonar obstructiva crónica genera más del 6% de las muertes mundiales
Business Empresarial.- La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, mejor conocida como EPOC, es una afección frecuente, prevenible y tratable, que se caracteriza por la obstrucción crónica del pasaje de aire a los pulmones, dificultad para respirar, tos y síntomas que progresan con el paso del tiempo.1 Actualmente, esta patología es la tercera causa de muerte a nivel mundial y es muy frecuente en países de bajos recursos.8
La EPOC se origina por la exposición a largo plazo o continua a gases irritantes o partículas de materia, más a menudo por el humo del cigarrillo. Las personas con enfermedad pulmonar obstructiva crónica tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, cáncer de pulmón y varias otras afecciones.2
Esta enfermedad no siempre está subdiagnosticada.3 A menudo, se le confunde con “Bronquitis crónica” (la inflamación del revestimiento de los bronquios, que llevan el aire hacia y desde los sacos de aire o alvéolos de los pulmones) y «Enfisema» (una afección en la que los alvéolos al final de los pasajes de aire más pequeños (bronquiolos) de los pulmones se destruyen como resultado de una exposición perjudicial al humo de cigarrillo y otros gases y partículas irritantes). 4
Síntomas y alertas de su avance
“Los síntomas pueden llegar a ser silenciosos y no suelen aparecer hasta que se produce un daño pulmonar significativo. Se conoce que empeoran con el tiempo, sobre todo si la exposición al tabaco es continua”, explica el Dr. Alfredo Guerreros, Médico neumólogo y past presidente de la Sociedad Peruana de Neumología. Según el especialista, los signos y síntomas de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica pueden incluir los siguientes5:
- Falta de aire, especialmente durante la actividad física
- Sibilancia o sonidos agudos durante la respiración
- Tos crónica
- Opresión del pecho
- Infecciones respiratorias frecuentes
- Falta de energía
- Pérdida de peso involuntaria
- Hinchazón en tobillos, pies o piernas
La EPOC no se cura, sin embargo, el tratamiento farmacológico y la fisioterapia reducen los síntomas, la frecuencia y gravedad de las exacerbaciones (agudización de síntomas), mejoran la tolerancia al ejercicio, reducen el riesgo de muerte y, en consecuencia, mejora el estado de salud. El tratamiento es individualizado y puede incluir medicamentos de rescate, así como broncodilatadores solos o combinados, que son aplicados a través de un dispositivo inhalador ideal, los cuales deben ser recetados por un médico neumólogo6.
La exposición al humo del tabaco es el factor de riesgo más significativo para la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. A su vez, también destaca el padecer asma, la exposición ocupacional a polvos y sustancias químicas, la exposición a los gases de la quema de combustible, causas genéticas y otras.7 El Dr. Guerreros enfatiza que, en países como Perú, otro factor de riesgo es el uso de combustible de biomasa, leña o carbón que se suele emplear para cocinar.
48% de los casos en jóvenes presentan estrés y ansiedad como secuelas
Según un reciente estudio -realizado con 1,300 pacientes con EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica)- se encontró que este mal respiratorio tiene un alto impacto físico y psicosocial en pacientes jóvenes (45-50 años). Un 48% de pacientes jóvenes con EPOC se sienten estresados y ansiosos por la enfermedad en mención. Mientras que un 28% de los pacientes mayores a 60 años indicó sentirse estresado. Cifras que muestran la diferencia de emociones de cada grupo etario frente al padecimiento.
En cuanto a los efectos que causa la EPOC en las actividades diarias, casi la mitad de pacientes (44%) de 45-54 años indicó que les obliga a tomar continuas pausas para recobrar la falta de respiración o toser en sus rutinas. A su vez, un 37% de esos pacientes precisó que esta condición genera un gran impacto en sus tareas fuera del hogar. Este panorama reflejaría que la dolencia puede complicar el desarrollo de acciones cotidianas como el trabajo, actividades de ocio, entre otras.
El informe global recomienda que se brinde mayor asistencia médica y psicológica a los pacientes jóvenes que padecen de EPOC (45 y 54 años de edad), sin dejar pasar por alto las consecuencias que trae esta afección para ese grupo de pacientes. Además, se debe continuar concientizando a toda población sobre la prevención y tratamiento de la patología que afecta gravemente a los pulmones.