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Claves para aumentar nuestra felicidad y mejorar nuestro bienestar emocional

Business Empresarial.- La búsqueda de la felicidad ha sido uno de los principales anhelos de la humanidad. Sin embargo, en la actualidad, la sociedad enfrenta diversos desafíos que afectan nuestra salud mental.

El Día Mundial de la Felicidad, también conocido como «Yellow Day«, es una celebración anual que tiene lugar el 20 de junio. Durante este día, personas de todo el mundo se unen para estimular la alegría, la positividad y la felicidad en sus vidas y en la sociedad en general. El color amarillo se utiliza como símbolo de esta jornada, ya que representa la energía, la luminosidad y la vitalidad.

Es aquí donde la conexión entre el día mundial de la felicidad y la salud mental se vuelve relevante. La búsqueda de la felicidad no implica la ausencia de dificultades, sino la capacidad de enfrentar los desafíos de la vida con resiliencia y optimismo. Fomentar la felicidad y el bienestar no solo beneficia a nivel individual, sino que también contribuye a la construcción de comunidades más fuertes y sociedades más saludables.

De esta forma, los expertos de la Clínica López Ibor ayudan a encontrar las claves para abordar los trastornos afectivos y aumentar nuestra felicidad:

  1. Practicar el autocuidado: es fundamental cuidar nuestra alimentación y mantener una rutina de ejercicio físico regular. Una dieta equilibrada y nutritiva puede influir en nuestra salud mental de manera significativa. Alimentos ricos en nutrientes como omega-3, vitaminas B y D, y antioxidantes, han sido asociados con la reducción de los síntomas depresivos y el mantenimiento de un buen estado de ánimo. Incorporar frutas, verduras, pescado, nueces y granos enteros en nuestra alimentación diaria puede ser beneficioso tanto para nuestra salud física como mental. Realizar 30 minutos de actividad física, ya sea caminar, asistir a una clase de baile o seguir una rutina de ejercicios, ayuda a reducir el estrés y liberar endorfinas que generan una sensación de placer.
  2. La felicidad no se finge: Las redes sociales y la sociedad actual a veces promueven la idea de que podemos esforzarnos por ser felices, considerando la felicidad como una meta a alcanzar. Incluso se ha denominado a este fenómeno «depresión sonriente», que hace referencia a situaciones depresivas en las que las personas ocultan los síntomas de la depresión. Represar las emociones complica su gestión y fomenta el autoengaño. Aunque no se debe fingir la felicidad, sonreír tiene un impacto positivo en la salud mental. Por eso, aunque no se finge, hay que ser positivos y mirar la vida con optimismo.
  3. Mirar la vida con optimismo es una perspectiva que nos permite afrontar los desafíos diarios con una actitud positiva. Al adoptar una visión optimista, podemos encontrar oportunidades en lugar de obstáculos, lo que nos impulsa a buscar soluciones y aprender de las experiencias. Además, sonreír desencadena beneficios significativos en nuestra salud mental y emocional. La simple acción de sonreír activa la liberación de endorfinas, neurotransmisores que generan sensaciones de bienestar y alegría.
  4. Desarrollar resiliencia. Al enfrentar los desafíos como oportunidades de aprendizaje, desarrollamos una mayor claridad mental, una mayor autoestima y una mayor sensación de control sobre nuestras vidas. La resiliencia nos ayuda a mantener una salud mental sólida y nos empodera para enfrentar los altibajos de la vida con valentía y confianza en nuestro propio potencial.
  5. Evitar la procrastinación es importante establecer metas claras, crear un plan de tareas, eliminar las distracciones, utilizar técnicas de gestión del tiempo, practicar la autorregulación, establecer recompensas y consecuencias, y buscar apoyo y rendición de cuentas. Al implementar estas estrategias de manera consistente, podemos superar la tendencia a posponer y aumentar nuestra productividad, logrando así una sensación de logro y bienestar en nuestras vidas.
  6. La naturaleza también desempeña un papel importante en la mejora de nuestra salud mental. Pasar tiempo al aire libre, disfrutar del sol y conectar con la belleza de la naturaleza pueden tener un impacto positivo en nuestro estado de ánimo y bienestar. La naturaleza es un espacio de tranquilidad y serenidad, que se aleja del estrés y permitiéndonos encontrar momentos de felicidad y conexión con nosotros mismos.
  7. Buscar ayuda profesional es clave para abordar los trastornos afectivos y otros problemas de salud mental. Los expertos en salud mental como psiquiatras y psicólogos están capacitados para brindar el apoyo necesario y guiar a las personas hacia estrategias efectivas para mejorar su bienestar emocional. A través de terapias individuales o grupales, es posible explorar las causas subyacentes de los trastornos afectivos y desarrollar herramientas para superarlos. El tratamiento de trastornos afectivos como la depresión, el trastorno bipolar o trastorno de ansiedad conforman una de las prioridades de Clínica López Ibor, los cuales se trabajan con programas específicos.

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